Gordon Murray, junto Adrian Newey, componen el tándem de “ingenieros milagrosos” de la Fórmula 1: cada uno en su época ha tenido el “toque mágico” para hacer un coche ganador. Murray se caracterizó por incorporar a algunas de sus creaciones –del Brabham BT46B de 1978 al nuevo T50 de 2020 pasando por el McLaren F1 de 1992- un aspirador eléctrico de succión para potenciar la adherencia.
Reunimos cinco modelos que estuvieron a punto de arruinar –si no lo consiguieron- a sus fabricantes. Algunos fueron proyectos económicamente inviables, pero otros estuvieron soportados por grandes constructores y no pudieron evitar un fracaso comercial. Entre ellos está el Tucker Torpedo, el Ford Edsel, el NSU R80, el DeLorean MC12 y hasta el reciente Maybach 62.
Por más que se empeñen los políticos, el futuro del automóvil no es eléctrico, sino de los combustibles artificiales alternativos. El “e-Fuel” sintético y el “Biocombustible” son opciones más viables para sustituir a los derivados del petróleo. Eliminan las emisiones contaminantes a la vez que permiten al inmenso parque automovilístico mundial no ser achatarrado.
A lo largo del último siglo hemos visto muchos “micro-coches”, del FIAT Topolino al Biscuter, del Isetta al Honda Civic… Pero si hay uno que representa a este segmento y que conoce todo el mundo, ese es el Smart.