Mi Fórmula 1 de diario

Varias marcas artesanales producen monoplazas homologados para su uso en carretera. Pero ninguno es como el BAC Mono R, que ofrece una relación peso-potencia de 137 CV por litro. O lo que es lo mismo: 618 CV por 1.000 Kg, la misma que un Hypercar de Le Mans. A diferencia de él, es más accesible y permite ir a por el periódico o a hacer un “track-day” en un circuito. Y ocupa mucho menos espacio en el garaje…

BAC Mono R

No lo recomendamos como “segundo coche” por más divertido que sea, porque tiene unas prestaciones de asustar. Además, es el vehículo más egoísta del mundo, porque sólo cabe el conductor, y está pensado exclusivamente para su disfrute personal. Con 343 CV de potencia para sólo 555 Kg de peso, suspensiones y frenos proporcionados y a cielo abierto, el BAC Mono R es un fórmula matriculable para rodar en carretera, pero que tiene su hábitat natural en un circuito cerrado.

El BAC Mono R tiene Grafeno en su carrocería

La Briggs Automotive Company, fundada en 2009 por los hermanos Neill e Ian Briggs, tiene sede en la industriosa ciudad británica de Liverpool y un claro objetivo: producir monoplazas de carretera de altísimas prestaciones. Para ello cuenta con un gran departamento tecnológico, que aporta los últimos materiales y sistemas de fabricación. Su modelo “Mono” ya causó sensación hace unos años. Ahora lo supera el “Mono R” mejorado en todos sus aspectos con el empleo de nueva cinemática de suspensiones o el uso del Grafeno en su carrocería.

Contando con personal procedente de la alta competición, el BAC Mono R ha evolucionado en peso y rigidez con el empleo de Grafeno 44 incorporado a la fibra de carbono. Desarrollado por la Universidad de Manchester, este material de grosor atómico sirve para reforzar y aligerar la fibra de carbono de chasis y carrocería. Le aporta un 20% menos de peso y una rigidez 200 veces superior a la del acero. Además ha permitido rediseñar el perfil del coche para hacerlo más aerodinámico.

555 Kg de peso y 343 CV para un monoplaza de carretera

En BAC han buscado una reducción general del peso total. Se ha empleado el magnesio en elementos del chasis y de la transmisión, así como Inconel en el escape, discos de freno carbón-cerámicos o suelo de carbono. En total se han ganado 25 Kg, que dejan 555 en la báscula. El motor de 2,5 litros atmosférico, con nueva admisión, proporciona 343 CV (38 más que su predecesor) ascendiendo hasta 8.800 rpm. Aun así, es suficientemente elástico para circular por rutas abiertas.

BAC Mono R

Para bajar el centro de gravedad se han situado el depósito de combustible y la batería más bajos. Las suspensiones también se han mejorado con geometrías “anti-dive” y “anti-squat” que permiten que el coche no bascule longitudinalmente en aceleraciones y frenadas violentas y pierda tracción. Ahora cuentan con amortiguadores Öhlins ajustables en dos vías, como un monoplaza de competición. Y Pirelli ha desarrollado un neumático “Trofeo R” para el Mono R, así como otros más “Racing” en opción.

Prestaciones próximas a un Fórmula 1

BAC ha enviado coches a algunos circuitos famosos, como el Red Bull Ring austriaco o el Goodwood británico. El piloto Adam Christodoulou batió el mejor tiempo de un LaFerrari en 6 segundos en Austria, mientras que Oliver Webb se quedó a menos que eso del record marcado por un Fórmula 1 en el trazado inglés. Como los Mono R son también objetos de lujo, cada uno de los 25 programados en construcción puede personalizarse completamente. De hecho, no hay dos iguales, lo que aumenta su valor de colección.

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