Cuando los BMW eran auténticos BMW

Aún recuerdo el primer BMW que conduje: Un 323i, un E21 de los últimos (1982). Me enamoré de ese coche, de su calidad, de sus prestaciones, pero, sobre todo, de sus sensaciones. Luego tuve la fortuna de probar a fondo el BMW M535i, un coche en el que la M era apellido, no un nombre. Y me sedujo… Y ahora he probado un BMW M8 Competition… sin duda un coche excepcional, pero que no me ha enamorado ni me ha seducido tanto…

Hoy estrenamos sección al final, «La prueba del día». Pero antes, ¡a ver! ¡Tranquilidad! Porque ya me imagino a muchos diciendo que si no me seduce un coche de 625 CV, «qué es lo que me va a seducir». Mi respuesta es que las prestaciones y las sensaciones no van de la mano… El M8 es tan rematadamente bueno, tienes tantas ayudas mecánicas, como el cambio secuencial o la tracción total, y tantas electrónicas, que puedes entrar en una rotonda mojada, acelerar a tope… y no pasa nada.

En cualquiera de los otros dos coches que he citado, la cosa acabaría mal… como mínimo en un trompo. Os adelanto una cosa: En este vídeo va a tener más peso el Máximo aficionado que el Máximo profesional… Es algo que me pedís a menudo. Espero no meter la pata…

Esto no es un panfleto anti BMW

Y quien quiera ver en este vídeo un panfleto «anti-BMW» pues se equivoca. Reconozco tener cierta debilidad por esta marca. Siempre digo que soy más de «modelos» que de marcas… me encanta BMW pero me horroriza, por ejemplo, el BMW X1, SUV y tracción delantera. Y eso que el coche va de fábula, pero os recuerdo que hablo como aficionado quizás en ocasiones un poco radical.

¿Sabes que a Máximo no le gustan mucho los SUV?

Pese a ello en la lista de mis 10 marcas favoritas entraría BMW… incluso en la de cinco. Como por ejemplo Porsche. Y ambas marcas tienen cierto paralelismo, Porsche ha pasado de hacer solo coches deportivos a «hacer de todo», como BMW que también «se ha echado al monte» produciendo berlinas, turismos, SUV, diésel, híbridos, eléctricos… de todo… incluidos coches de tracción delantera, algo en lo que ha tardado más que, por ejemplo, Mercedes. Y ambas utilizan motores «ajenos», Mercedes ha utilizado motores Renault y BMW motores desarrollados conjuntamente con PSA…

¿Qué quieren los accionistas?

Pero ambas marcas, me refiero en este caso a BMW y Porsche, han conseguido lo que sus dueños, o sea, los accionistas quieren. ¿Y qué quieren los accionistas? Sencillo, ¿verdad Rodrigo? ¡Ganar dinero!

Los tiempos han cambiado. Y mucho. Nos vamos al año 1985, cuando probé a fondo el BMW M535i. De la prueba que escribí muchas cosas me han llamado la atención, pero una más que todas: El cuadro que llamábamos «Resumen de pruebas«, un cuadro donde reflejamos los recorridos que habíamos hecho, con datos de condiciones del tráfico, velocidad de crucero, velocidad media real y consumo.

Resumen de la prueba del BMW M535i

Atentos, que os voy a leer unas líneas y os aseguro que ¡vais a flipar!:

Recorrido por autopista. Crucero: 180 km/h. Media: 162 km/h…

Y más todavía, para rematar: Recorrido por autopista. Crucero: 200 km/h. Media: atentos… redoble de tambor ¡195,4 km/h! Del consumo, mejor ni hablar: Más de 22 l/100 km.

No, yo no era un salvaje… bueno o quizás sí, pero no más que mis compañeros probadores o que los probadores de otras revistas de coches. Es que en esos años se podía publicar estas cosas cada semana e insisto… ¡no pasaba nada! No te mandaban a la cárcel.

¿Te gusta conducir?

Creo honestamente que BMW acertó de lleno con esta campaña. Os cuento porque: Porque desde aquel primer 323i que conduje hasta el M535i todos los BMW que conduje me sedujeron por su agrado de conducción.

Puesto de conducción perfecto, tacto de dirección exquisito, cambio rápido y preciso, suspensiones refinadas, buenos frenos, respuesta del acelerador, comportamiento progresivo y verdadera sensación de calidad. Esto último, sensación de calidad, es una sensación real, y que siguen teniendo todos los BMW que he probado, del primero al último, el M8.

En esa prueba utilizaba una frase recurrente en esa época, pero real: «Mano dura en guante de seda«. Y es que ese M535i como la mayoría de los BMW que le siguieron y sobre todo si aparecía la M eran coches que requerían destreza, necesitaban que el conductor demostrase «autoridad», pero
luego fueron llegando los controles de tracción, los controles de estabilidad, cada vez más eficientes y cada vez más intrusivos en la conducción. Y más tarde los SUV, los tracción total, los tracción delantera, los híbridos y los eléctricos. Y ya no es lo mismo.

Te recomendamos el vídeo «Cuando los Mercedes eran verdaderos Mercedes«.

La electrónica te saca de cualquier apuro

Como os decía, con el BMW M8 Competition he hecho la prueba de entrar en una rotonda mojada y acelerar a fondo y… sí, el coche desliza ligeramente de atrás, se encienden luces en el salpicadero, el control de estabilidad trabaja a destajo: Freno esa rueda, acelero la otra, resto potencia… pero no pasa nada.

Y no, no me vale que me digáis: «Pero lo puedes desconectar». Con un coche de dos casi dos toneladas, 5 metros y 625 CV no se puede ir por la calle sin red. Os recuerdo que el M535i, del que se destacaba su potencia, tenía 218 CV y media tonelada menos de peso.

Por consejo mío «mi ex» tiene un BMW i3 y está encantada… para mi es quizás el eléctrico más divertido y agradable de conducir. Es decir, que BMW sigue siendo capaz de hacer coches eficientes y con la última tecnología, pero que ofrecen un agrado de conducción por encima de la media.

¿Compras un coche por presumir?

¿Hasta cuándo? Desde luego, el día que BMW fabrique coches autónomos el rollo ese de «¿Te gusta conducir?» se va al garete. También os aseguro que, sobre todo entre modelos SUV y no tan deportivos, muchos usuarios que compran la marca más por el prestigio y por presumir, que por el placer de conducción.

BMW se ha puesto al día, se ha modernizado, y ofrece una gama más completa de toda su historia… aunque quizás no todos sus modelos, por sensaciones y placer de conducción, sean «tan BMW» como fueron en otros tiempos….

Siempre nos quedará los modelos M… Y hoy estrenamos sección: No hay «Coche del día» sino «Prueba del día».

Comparte

Te puede interesar