Retromobile, el sueño del coleccionista

Si hay un Salón de vehículos clásicos que sobresale en el mundo, ese es Retromobile Paris. Celebrado a comienzos de febrero cada año en los pabellones del parque de la Puerta de Versailles, reúne a la “flor y nata” de los restauradores, coleccionistas, vendedores y casas de subastas. Lo que se ve allí reunido es mejor que cualquier museo. Y muchos automóviles cambian de manos cada año por millones de euros…

Retromobile

Retromobile Paris ha ido creciendo hasta convertirse en el “súper-salón” de clásicos de todo el mundo. Ahora, más que una exposición, es un punto neurálgico de negocio que mueve cientos de millones de euros. A él acuden los mayores coleccionistas y también los mejores vendedores de este mercado tan particular y tan lucrativo. Lo que se transfiere en las subastas ya no son vehículos, sino obras de arte sobre ruedas que –raramente- van a ser conducidas.

Retromobile, todo un acontecimiento mundial

Esta edición ha ocupado tantos metros cuadrados, que algunas subastas se han celebrado en otros lugares, como en el Grand Palais Ephimere. Coches y motos de todas las épocas, objetos de arte, automobilia, grandes eventos… todo tiene cabida en Retromobile. El centenario de las 24 Horas de Le Mans ha sido un poco el “leiv-motiv” este año, en el que –sea o no por ello- han destacado los automóviles de competición, que siguen siendo muy, pero que muy deseados.

Retromobile

Así, los enormes y deslumbrantes stands de los principales vendedores estaban plenos de colorido. La británica Fiskens ofrecía la oferta más espectacular con catorce coches a cual mejor, entre ellos un Porsche 917 con los colores de Gulf como el protagonista de la película Le Mans o un 962-Rothmans. O unos “mejor que nuevos” Aston Martin DB3S y DBR9 GT1 participantes en la gran clásica, pero separados por cuatro décadas.

Muchos coches de Le Mans en este Retromobile

Entre todos los expositores bien podría completarse una parrilla de salida de las 24 Horas. Por ejemplo, Ascott Collection mostraba dos Nissan R90 CP y CK Grupo C de los ’80 y el Morgan LMP-2 decorado por el artista Fernando Costa. O JMB Classic alineaba varios GT1 y GT2 de los ’90, entre ellos Viper, Corvette y hasta un Toyota GT One y un Panoz. O el especialista francés, Aguttes on Wheels, que tenía un Jaguar D Type junto a un Lola T280… Y por allí andaba también el raro Jaguar-Silk Cut XJR14, campeón del mundo de Grupo C  en 1991, junto a dos Audi y un Nissan, todos de Le Mans…

Retromobile

¿Que si no había Ferraris? Naturalmente. ¡Qué sería de Retromobile sin Ferraris! Había y muchos. Sólo Girardo & Co contaba con trece en su stand, presididos por un 512S de 1970, el rival del Porsche 917. Los valiosísimos 250 GT se mostraban en varias formas y generaciones, desde un California Spyder hasta un Europa, todos ellos perfectos hasta el último detalle y a la venta. La mayor parte eran ejemplares únicos, con “nombre y apellidos” y con historial en competición.

Maserati, Bugatti, Alfa Romeo… nada falta en Retromobile

Las marcas italianas siguen haciendo furor entre los inversores y es que nadie puede negar la belleza de sus creaciones. Desde antiguos Maserati de Gran Premio hasta “modernos” Bugatti Eb110, pasando por Alfa Romeos de cualquier época… Kidston Motor Cars había preparado una puesta en escena espectacular apodada “L’Esposizione” para sus coches italianos, donde destacaba un Alfa 8C 2900B Touring de 1937 o un 1900 SS Zagato de las Mille Miglia en los ’50, junto a varios Ferrari de la misma época en estado impecable.

Retromobile

La marca de relojes del coleccionista Richard Mille trajo esta vez un par de Ferrari de Fórmula 1: el 312T de Clay Regazzoni de 1975 y el F1/91 de Alain Prost. Casi toda la gama de la firma de Maranello estaba representada entre los distintos stands: 275 GTB, Superamérica, F40, 250 SWB, 512BB, 599… Coches restaurados o restauradísimos, algunos premiados en Concursos de Elegancia. Y naturalmente, todos originales y con “pedigrí” demostrado.

Los coches alemanes tampoco faltaban este año

Las marcas alemanas también tienen su protagonismo, aunque los numerosísimos Porsche 356 y 911 apenas destacaban entre tanta pieza millonaria. Sí lo hacía, en cambio, el Mercedes 300SL Roadster de Axel Schuette, sin duda el mejor del Salón. También había un par de sobrevalorados BMW 507 aportados por Movendi. Audi contaba con algunos Quattro muy especiales, como una versión de rallye Safari. Lo que no abundaban tanto eran los coches ingleses (pero no faltaban Minis), aunque sí franceses: Peugeot festejaba los 40 años de su famoso y popular 205.

Comparte

Te puede interesar