Ferves Ranger, el FIAT 500 todoterreno

Que el FIAT Nuova 500 fue el coche más popular de Italia en los ’60 no es ninguna novedad, pero pocos conocen el Ferves Ranger, un todoterreno en miniatura basado en él. Producido por la marca Ferves entre 1965 y 1971, es la versión más extrema del 500 nunca vista, con prestaciones de auténtico 4×4 para campo, playa o montaña. Un polivalente muy práctico para uso rural y de dimensiones muy reducidas.

Ferves Ranger, el FIAT 500 todoterreno

El FIAT 500 motorizó Italia como aquí hizo el 600. De tamaño aún más pequeño y propulsado por un motor bicilíndrico de 499 cc, era el vehículo urbano ideal. Su éxito fue tal, que se produjeron casi cuatro millones de unidades durante varias décadas. Y aún hoy es fácil verlos por las ciudades y pueblos de Italia, algunos como nuevos. Naturalmente, fueron objeto de preparaciones deportivas (como Abarth o Giannini) y de transformaciones de todo tipo.

Un Ferrari que no lo es tanto

Ferves -FERrari VEhícoli Speciali- del ingeniero Carlo Ferrari (ningún parentesco con la marca del Cavallino) fue uno de tantos preparadores y carroceros que realizaron versiones especiales. Sin embargo, Ferves no se limitó a modificar la carrocería, sino que replanteó completamente el coche con intención de crear un mini-todoterreno con la mecánica del 500, con aptitudes Off-Road y un tamaño inferior a los tres metros de longitud.

Ferves Ranger, el FIAT 500 todoterreno

Presentado en el Salón de Turín de 1965, el Ferves Ranger era único. Medía 2,63 metros de longitud (menos que el 500 original), era apto para cuatro pasajeros y contaba con suspensiones independientes y un cambio acortado. Aunque se produjo con 2 ruedas motrices (las traseras, ya que empleaba la mecánica del FIAT) también hubo un Ranger 4×4, con 2,83 metros de largo. Aunque montaba diminutas llantas de 10”, no había obstáculo ni pendiente que se le resistiera.

Chasis y carrocería propios, mecánica FIAT 500

Ferves produjo un chasis simple de tubo cuadrado que sostenía los elementos mecánicos y los anclajes de suspensión con gran recorrido. Atrás conservaba la original caída negativa del 500. Pero delante llevaba el puesto de conducción avanzado y la columna de dirección iba hacia atrás. Aunque no llevaba autoblocante, sí un ingenioso sistema sustitutivo: dos palancas en el túnel que frenaban independientemente las ruedas traseras, de modo que toda la potencia del motor se aplicaba en la otra.

Ferves Ranger, el FIAT 500 todoterreno

Gracias a su corta batalla y a este sistema, el Ferves Ranger era capaz de girar casi sobre su propio eje y de dar la vuelta con un radio de apenas 6,6 metros. La carrocería de chapa, con forma de balsa, era rudimentaria pero simpática, con puertas desmontables y parabrisas abatible. Cabían cuatro pasajeros –no muy cómodos, eso sí- o se podía elegir una opción “pick-up” denominada “Cargo”. Era más práctica para labores rurales y agrícolas, porque podía con 300 Kg.

El Ferves Ranger es una pieza de coleccionista

El Ferves Ranger se fabricó hasta 1971 en una cantidad de 600 unidades entre todas las versiones, de las que se conservan unas 50. Ahora se valoran mucho cuando aparecen en una subasta, sobre todo si están restauradas. Su motor bicilíndrico de 499 cc apenas es capaz de alcanzar los 80 Km/h debido al desarrollo del cambio, pero el cochecito es simpático y divertido de conducir. Un juguete para hacer todoterreno con estilo!    

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