El Porsche Macan acaba de recibir una puesta al día por parte de la marca. Y cuando Porsche pone la mano sobre cualquiera de sus productos no suele ser solo para dar una palmadita en la espalda y pasar de largo. Aunque en este caso, el Porsche Macan ha recibido más atenciones en las vitaminas de su motor que en el maquillaje, o sea, en la estética. ¿Será porque mucha falta tampoco le hacía?
Por fuera parece el mismo, pero han cambiado algunas cosas. Es cierto que para verlas hay veces que hay que ser un experto en el juego de “las diferencias”. Lo más importante está en su motores. El Porsche Macan tiene tres versiones, y los dos primeros, que son el primero de acceso a la gama, y el segundo, han ganado 20 y 21 caballos de potencia, respectivamente. El tercero sustituye ahora a la extinta versión Turbo, que desaparece de la gama como tal denominación, aunque no su potencia.
El Porsche Macan pasa de complejos
Porsche afirma que el Macan es todo un éxito de ventas. Antes de que conociera la cifra que voy a comentar más adelante, no era difícil ver el resultado en ventas en la misma calle o en la carretera, donde se ven bastantes Porsche Macan.
Parece que si el Porsche Cayenne fue todo un bestseller, el Porsche Macan es todo un Porsche protagonista de los de culebrón, pero de los buenos. Desde su lanzamiento, van más de 600.000 unidades salidas de la fábrica. Casi nada, y a mi es que estas cifras siempre me parecen inimaginables; mi cabeza no es capaz de ver tanto coche junto… Seguro que más de un porschista puro se echa las manos a la cabeza. Aunque ya debería estar curado de toda sorpresa.
Una vez oír decir, creo, que en Porsche nunca habría un deportivo de cuatro puertas. Y un día apareció el Panamera, y luego otros. También creo haber escuchado que en Porsche nunca habría un todoterreno. Y un año apareció el Cayenne, y luego otros como el Macán. Claro, que también creo haber entendido que también se dijo que nunca habría un coche diesel en Porsche y… Lo que nunca oí fue que nunca habría un eléctrico de la marca. Supongo que porque el propio profesor Porsche ya experimentó con la electricidad en sus inicios y en el propio museo de la marca se exhibe una rueda con un motor eléctrico de Porsche. Y de cualquier forma, sino lo oí ni lo vi escrito nunca, “si non e vero e ben trovato”…
En fin, que este nuevo Porsche Macan es una actualización, una puesta al día, un restyling, como lo prefieras. Y mejoran cosas, muchas en realidad. Por ejemplo, por fuera los paragolpes son de nuevo diseño –casi siempre los fabricantes empiezan por aquí para mejorar la imagen–, pero también las llantas –otro clásico en los cambios–, las molduras de las puertas, etc. Las llantas son como mínimo de 19 pulgadas, y como máximo de 21.
Además, Porsche incorpora nuevos colores en la gama, que también es otro clásico a la hora de actualizar modelos de coches. Son tres los colores nuevos: Verde Pitón, Papaya metalizado y Azul Gentian también metalizado –siempre he querido ser uno de los que le ponen el nombre a los colores de los coches, aunque no debe ser fácil–.
Y si sigo con las enumeraciones de los cambios estéticos más relevantes, vamos a meternos dentro del habitáculo. La palanca de cambios, aunque sea un coche automático, es más corta y distinta. También el volante, que es el del 911 más moderno. A su vez, ha suprimido los botones de la consola por una superficie plana con signos de los botones a los que sustituye y estos los ha hecho más “digitales”. Es muy bonito y lujoso pero menos práctico a la hora de usarlos. Qué se le va a hacer, la modernidad manda. Menos mal que algunas funciones básicas si que siguen siendo por botones físicos y digamos que de generoso tamaño. Y a partir de este Porsche Macan, el reloj de encima del salpicadero es de serie en todas las versiones.
Adiós al Porsche Macan Turbo y hola al Macan, S y GTS
Son tres las versiones que Porsche comercializa en España del Macan. La primera es la Macan, sin apellido, y no es que sea un Porsche “desheredado”, sino que marca el escalón de inicio de la gama, como solemos decir. El básico si quieres sintetizar, aunque de básico nada de nada, entre otras cosas porque parte de 68.540 euros de venta. Tiene suspensión de muelles helicoidales y amortiguadores normales.
Los tres Porsche Macan tienen varios denominadores comunes, como el cambio automático de doble embrague PDK de siete velocidades, la tracción total que ahora prima más el envío de fuerza al eje trasero en su reparto del mismo, barras estabilizadoras de mayor diámetro y suspensión mejorada así como la dirección. Estas son, principalmente, las cosas más relevantes, que no las únicas. Ah, y que todos los motores, sea cual sea su potencia, tienen la sobrealimentación por turbocompresor como protagonista.
El Porsche Macan tiene un motor de 265 caballos de potencia. Vale, es un cuatro cilindros frente a sus hermanos de gama de seis cilindros, pero ni qué decir tiene que empuja bien y que con esos 20 caballos ganados frente al Porsche Macan de la gama pasada, no cabe hacerle ningún aspaviento. Vamos, que es recomendable 100%.
El Porsche Macan S alberga debajo del capó un motor V6 de 3,0 litros de 381 caballos de potencia. Eso hace que haya aumentado 21 caballos la potencia del anterior Porsche Macan S. No está nada mal. Tiene un precio de partida de 83.464 euros. La suspensión de este es de muelles helicoidales y amortiguadores electrónicos, que es opcional para el Porsche Macan.
Y en lo más alto de la pirámide está el Porsche Macan GTS. Es el que sustituye, como decíamos, al Porsche Macan Turbo. Es la versión más deportiva, teniendo en cuenta que todos los Porsche Macan son lujosos, rebosan calidad, andan muy bien y tienen un comportamiento absolutamente envidiable con ese toque deportivo de la marca que tan característico y que les hace tan fácil de llevar. “Toque deportivo” que no es ni mucho menos igual a incómodo, que quede claro. Cuesta, cómo mínimo, 102.427 euros.
Pues eso, que el Porsche Macan GTS ofrece un motor V6 bajo el capó de 441 caballos. Son 60 caballos más que el anterior Porsche Macan GTS y, de paso, coincide con la potencia del Porsche Macan Turbo que desaparece de la gama.
El Porsche Macan GTS recibe toda clase de atenciones. Es el atleta preferido y por eso es el más considerado. De serie tiene cosas como las llantas de 21 pulgas, la máxima en la gama; suspensión neumática, que en las otras versiones es opción; sistema Porsche Torque Vectoring Plus –o PTV–; todos los grupos ópticos oscurecidos; paragolpes con parte de la superficie pintada en negro; cuatro salidas de escape; alerón en el techo; paquete Sport Chrono, etc. Ni que decir tiene que la lista de equipamiento en Porsche es larga, pero cuando te pones a mirar el equipamiento opcional, casi no te lo acabas y encima a precios acorde a la marca. Por eso, cuando un modelo tiene más equipamiento de serie pues te frotas las manos.
