Ferrari 296 GTS, la saga continua con este biplaza descapotable

La nueva obra maestra de Ferrari es el 296 GTS, un descapotable biplaza basado en el Ferrari 296 GTB, una mecánica híbrida enchufable de 829 caballos nada menos, caja de cambios de doble embrague y tracción trasera capaz de ponerse a 100 km/h con salida desde parado en solo 2,9 segundos, a 200 en 7,6 y de alcanzar una velocidad punta de 330 km/h. Un atleta puro.

No hay más que verlo. El nuevo Ferrari 296 GTS (Gran Turismo Spider) es a todas luces un deportivo ganador. En todos los sentidos. Ferrari no solo ha sabido darle una imagen de marca espectacular, como lo hacen ellos, también una base mecánica y unos resultados sobre el asfalto poco más que sobrecogedores.

Toma la base del Ferrari 296 GTB, pero en este caso en versión descapotable, o Spider. Si el resultado estético del Coupé es impresionante, este más… al menos para los que les gusten las carrocerías abiertas. Para hacerlo, también engorda un poco, pues el si el Ferrari 296 GTB pesa oficialmente 1.470 kilos, el GTS eleva esa cifra en la balanza hasta los 1.540. Nada es gratis. Eso sí, la maestría de Ferrari sigue haciendo que el reparto de pesos se quede igual… igual de balanceado para conseguir el mejor resultado posible en comportamiento: 40,5% delante y 59,5% detrás. Como habíamos comentado, el Ferrari 296 GTS es tracción trasera, propulsión.

Un corazón muy potente que late hasta los 829 caballos y con hibridación

El Ferrari 296 GTS continua la saga de los Ferrari híbridos. En este caso, con la base mecánica del 296 GTB, detrás de los asientos acomoda un motor V6 de 120 grados entre bancadas y 3.0 litros de gasolina que ya desarrolla la friolera de 663 caballos él solito. Está asistido por dos turbocompresores, lo que ya da una idea no solo de su fuerza si no de su potencialidad general.

Para llegar a los 829 caballos que oficializa este Ferrari 296 GTS, la hibridación aporta un motor eléctrico de 166 caballos de potencia, el Motor Generator Unit-Kinetic, o MGU-K que es como lo llama la marca. También está detrás de los asientos, entre el motor de gasolina y la propia caja de cambios de doble embrague. Tiene la capacidad de que ambos motores funcionen a la vez, o independientemente según las circunstancias o carga a la que someta. Solo con el motor eléctrico puede hacer hasta 25 kilómetros. La batería es de 7,45 kWh de capacidad. No solo es híbrido, es híbrido enchufable.

Precisamente por ese sistema de hibridación, el Ferrari 296 GTS ofrece varios tipos de conducción, como es habitual en este tipo de coches con motores combinados. Son, el eDrive, para moverse solo en eléctrico; Hybrid, para que automáticamente el coche utilice uno, el otro, o los dos motores a la vez; Performance, donde el motor de gasolina siempre está funcionando; y Qualify, con el la mayor potencia posible siempre es la que manda. La palanca para seleccionarlos es ya la típica eManettino en los Ferrari híbridos (ahora todo se “arregla” con una “e” delante o al final del nombre en cuestión). Eso no le hace prescindir del Manettino “a secas” de los Ferrari para modificar la función de la suspensión, la entrega de potencia, etc. Ambas palanquitas en el volante, claro.

Aún pesando más que el Ferrari 296 GTB, el desempeño dinámico es sencillamente alucinante. Es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 330 km/h, y, lo mejor, de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 2,9 segundos. O de 0 a 100 km/h en 7,6”; ¡pero vaya, en esta última medición es 0,3” más lento que el Coupé!

Espectacular también en los detalles

Así es, sencillamente. Mira, el equipo de ruedas contempla de serie llantas de 20 pulgadas con neumáticos de 245/35 delante y 305/35 detrás. Pero es que como opcional, la marca deja a elección del comprador unos más grandes de la marca Michelin y del modelo Pilot Cup2R. Es verdad que para acceder a ellos hay que pagar por el paquete Assetto Fiorano que además lleva implícito detalles de diseño exclusivos, elementos rediseñados y aligerados y amortiguadores todavía más eficientes que los magnéticos que trae de serie.

Estéticamente puede verse claramente el alerón activo detrás, que llega a hacer hasta 360 kilos de fuerza hacia abajo a 250 km/h. Por su parte, el techo para hacerlo descapotable es de accionamiento eléctrico, cómo no podía ser de otra manera, y es de tipo duro en dos piezas. El tiempo de quitarlo o ponerlo es de 14 segundos y permite realizar esta maniobra en marcha hasta 45 km/h. El elemento que hace de cortavientos a velocidades elevadas es una luneta de cristal justo detrás de los asientos traseros que también se sube o se baja eléctricamente a voluntad.