No debieron prohibir los Grupo B

Este vídeo es muy ambicioso. ¿Por qué? Porque vamos a tratar de reparar una injusticia histórica en el Mundial de Rallyes: Los Grupo B no eran tan peligrosos. Y no era necesario prohibirlos. Y lo vamos a demostrar.

Las matemáticas no mienten

Siempre se dice que las matemáticas no mienten. Vamos a verlo. Entre 1982 y 1986, cuando estuvo vigente el reglamento del Grupo B, fallecieron dos pilotos y un copiloto. En los años siguientes, entre 1987 y 1989, en solo 3 años y ya sin grupo B, fallecieron 4 pilotos y 4 copilotos que, además, conducían coches realmente modestos…

Conclusión: ¿De verdad eran tan peligrosos los Grupo B? Pues, como veis, las matemáticas no engañan, durante la era Grupo B hubo tres decesos en 5 años, desde el 87 al 89, en solo 3 años, 9 decesos. Parece que los Grupo B no eran el problema… o al menos, no todo el problema.

Demasiada política

Por desgracia los que gobiernan el deporte del automóvil no dejan de ser políticos y actúan por impulsos y presiones. Prohibieron el efecto suelo en la F1 en 1982 con el mismo argumento: Que eran coches muy peligrosos. Pues veamos que dicen las matemáticas.

En la época del efecto suelo solo un piloto, Patrick Depailler, falleció por culpa de un fallo en el sistema relacionado con el efecto suelo, la rotura de una faldilla. Es cierto que fueron malos años, pero ni Peterson, ni Paletti, ni Villeneuve perdieron la vida por nada que tuviese que ver con el efecto suelo. En los dos primeros casos fue en la salida de la carrera y en el caso de Villeneuve, por un encontronazo con el March de Jochen Mass.

O sea, que por lo que se ve, el efecto suelo no era tan peligroso… de hecho, en 2022, ¡vuelve! Vivir para ver.

¿Tony Pond era un «blandito»?

¿Conocéis a Tony Pond? Seguramente no. Es un piloto inglés que básicamente corrió en su tierra y llegó a quedar tercero en el RAC de Inglaterra con un Grupo B, un Mini Metro 6R4. Pero Pond es conocido por una frase que dijo en una entrevista y que muchos medios no expertos en Motorsport, difundieron: En 1985, el piloto británico Tony Pond manifestó: «Parece que tengamos asumido que, tarde o temprano, uno de nosotros morirá en un accidente con uno de estos coches de nueva generación«. 

Una carta acabó con el Grupo B

En el Rally de Portugal de 1986 Joaquim Santos se salió del tramo con su Ford RS200 y acabó con la vida de tres espectadores, dos niños y una mujer, además de herir a otros muchos. Sobre el papel del Hotel Estoril-Sol varios pilotos firmaron una carta que fue el principio del fin del Grupo B. Pero en esa carta no se quejaban de las prestaciones de los coches, sino de la falta de medidas de seguridad que había en ese rallye, famoso por la afición que hay en ese país y porque los coches corrían entre filas de espectadores.

Cómo desapareció el Grupo B.

23 de mayo de 1986

En el Rallye de Córcega de 1986, el día 2 de mayo, Henri Toivonen y Sergio Cresto sufrían un tremendo accidente con su Lancia Delta S4 en el que perdían la vida.  En el mismo Rallye y el 2 de mayo de 1985 había perdido la vida Attilio Bettega. Resulta curioso que nadie pensase que a lo mejor la culpa no era de los Grupo B, sino de ese Rallye, especialmente peligroso como todo el mundo sabía.

¿De verdad eran tan peligrosos?

No es tan sencillo. ¿Eran peligrosos por la velocidad que alcanzaban? Los coches actuales son más rápidos en curva. ¿Eran peligrosos por su dificultad de conducción? Con los coches difíciles de conducir pasa una cosa: Marcan las diferencias entre los pilotos extraordinarios y los que son simplemente buenos, que van más despacio.

Lo que de verdad no estaba bien resuelto en los Grupo B eran las medidas de seguridad del propio coche, de su jaula antivuelco, de la cantidad y la forma de almacenar la gasolina y de los materiales en que estaban construidos, que hacían que se incendiasen con facilidad.

Nosotros hicimos nuestro propio Grupo B.

Seguridad en los rallyes

Porque no hay que olvidar una cosa: Que los rallyes sean seguros depende en parte de los coches. Pero en parte. Sobre todo, depende del trazado, de los obstáculos que existan, de como se gestione la presencia de público y de como esté prevista la atención en caso de accidente.

En esto se ha mejorado exponencialmente y los rallyes actuales son algo menos peligrosos para los pilotos y mucho menos peligrosos para los espectadores… Siempre digo una cosa, aunque sea cruel: “Si un piloto tiene un accidente grave es una pena, pero es un profesional y, aunque sea un aficionado, sabe a lo que se expone, es una decisión suya”. La seguridad de un espectador, de un padre que va con sus hijos, tiene que estar garantizada… 

¿Era posible la continuidad?

En mi opinión, sin duda sí. Si en vez de prohibir los Grupo B se hubiese actualizado la normativa técnica y de seguridad, los Grupo B o los nuevos Grupo S eran viables, sin ninguna duda. Había que cambiar las normas técnicas para reducir sus prestaciones, ya sea limitando la cilindrada de sus motores, el combustible o con bridas, como se hizo más tarde con los Grupo A.

En este vídeo te contamos cómo se conduce un Grupo B.

Conclusión

Para mi la prohibición de los Grupo B fue un mazazo a los rallyes. Se acababa un era dorada y se acababa con algo muy importante: Que los rallyes se corrieran con verdaderos prototipos. Hoy día podríamos tener una categoría de prototipos en los Rallyes. Más espectacular para los espectadores, mas exigente para los pilotos e incluso más barata para las marcas.

No sé si he conseguido mi objetivo de restaurar una injusticia histórica, lo he intentado. Ya sé que es un brindis al sol, pero los Grupo B no eran coches “asesinos” como algún tipo de prensa ha querida hacer ver. Eso sí, eran coches para pilotos de verdad. Creo que no hay mejor final para este vídeo que la famosa frase del único piloto que ha sido Campeón del Mundo con los Grupo B y con los Grupo A, Juha Kankkunen: “Los grupos A son para niños, los grupo B eran para hombres”. Solo me atrevería a corregir en una cosa al bueno de Juha: Para hombres… y para Michelle Mouton.

Aquí tienes algunos de los coches más representativos del Grupo B.

Coche del día

¡Pues un Grupo B, claro! ¿Cuál? Ya he elegido varios, pero no al Ford RS200, un coche que nació tarde, pero que era muy original y que podía ser una prefiguración de esos “Grupo B” post 1986, un modelo más cercano al Grupo S que al Grupo B. Era un coche con un diseño muy particular obra del brillante ingeniero Tony Southgate. Y no, no me refiero a su bonita carrocería obra de Ghia, sino al hecho de contar con caja de cambios delantera y dos arboles de transmisión 

Solo participó en cuatro pruebas del Mundial y fue el desgraciado protagonista del accidente del Rallye de Portugal en el que insisto, la culpa de fue del coche ni del piloto, la causa fue que hubiese espectadores en esa zona.

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