10 mentiras sobre los límites de velocidad

Alguien se debía de dar cuenta de que los radares no son eficaces para evitar accidentes. De que la policía de carretera sería más eficaz ayudando que persiguiendo a los conductores. De que los automovilistas somos más víctimas que verdugos… Vamos a desmontar unas cuantas mentiras sobre la vergonzosa gestión de los límites de velocidad.

En este vídeo hablamos sobre conducción eficiente.

Considero que en España y en la mayoría de los países que conozco los límites de velocidad y la gestión de los radares y las sanciones por exceso de velocidad es poco acertada. En España, directamente vergonzosa, porque en plan paternalista se nos dice que es “por nuestro bien” cuando no protegen al automovilista y en cambio, le sacan el dinero.

Los límites de velocidad y los radares que los controlan, en España, son un negocio y además no son eficaces para reducir la siniestralidad. Pero esto no es una opinión, os lo voy a demostrar de forma fehaciente con datos y argumentos. He dejado dos de ellos, incontestables, para el final…

En este vídeo hablamos sobre qué es conducir bien.

La velocidad: Lo más peligroso

Una de las mentiras más gordas que nos quieren vender. En este vídeo insistiré en varias ocasiones en que la propia DGT no se lee sus propias estadísticas. Según ellos los accidentes mortales en los que la principal causa es el exceso de velocidad van, según los años, entre un 3,36 por ciento en el ya lejano 1999 a un… un 0,9 por ciento en 2013. Sin comentarios.

Respeta los límites, no tendrás accidentes

Pues no. La diferencia entre ir a 120 km/h o a 130 km/h no es ir seguro o inseguro… como mucho irás un 8 por ciento más inseguro. Pero respetar los límites crea una falsa sensación de seguridad…

Los españoles no respetan los límites

Otra mentira. Y gorda. Solo un 17 por ciento supera los límites y solo un 2 por ciento, un triste 2 por ciento, supera lo que según la DGT son velocidades peligrosas… me parto de risa, según la DGT esa velocidad es de 140 km/h… Si fuese así en Alemania se estarían matando.

Los límites evitan la «velocidad inadecuada»

Analicemos que es eso de «velocidad inadecuada». Es una velocidad que resulta peligrosa para las condiciones de la vía, ojo a este dato, AUNQUE ESTE POR DEBAJO DE LOS LIMITES DE VELOCIDAD.

O sea, que vas circulando en plena tormenta a 90 km/h en una carretera limitada a 90 km/h, o sea que si hay un radar no te pilla, pero, ¿en esas condiciones es adecuado circular a 90 km/h? ¿O ir por el carril izquierdo de una autopista a 70 km/h? Seguramente no, por más que estes por debajo del límite.

Más velocidad, más accidentes

Insisto: Se ve que la propia DGT no lee sus propias estadísticas. Es muy llamativo si comparas, por ejemplo, 2004 y 2007: Dos años con una velocidad media en vías rápidas casi idéntica, 117,2 y 116,5 pero con 494 fallecidos en vías rápidas en 2004 y 140 menos víctimas en 2007… más claro agua.

Cosas parecidas suceden otros años y en otras vías, datos que demuestran de forma fehaciente que la velocidad influye, pero poco, en los accidentes.

No hay que fomentar los peajes

No os voy a aburrir con cifras, pero por hacerlo fácil, según la DGT la velocidad media en las autopistas de peaje es como unos 10 km/h mayor que en las autovías convencionales… pero hay muchos menos accidentes. La ecuación en este caso es sencilla: Si circulando 10 km/h más rápido en las autopistas de peaje hay menos accidentes, ¿no sería evidente que se debía de subir el límite de velocidad de estas autopistas esos 10 km/h?

¡Ojo! que no lo digo por correr más, sino por «sacar» coches de las congestionadas y más peligrosas autovías y llevarlos a las autopistas. ¿Te parece una tontería? Pues a los franceses no, que limitan la velocidad a 110 km/h en autovías y a 130 km/h en las vías de peaje…

Los radares los ponen por nuestro bien

Claro. Y lo de recaudar es porque no les queda otro remedio. Por eso no dedican muchos recursos a los radares… como diría mi hijo, es «¡eufemismo!»: Este año la DGT cuenta con 34 motos camufladas, 545 coches camuflados, 780 radares fijos, 23 drones y 10 helicópteros… Además, los radares de la Comunidades autónomos y municipios… los conductores somos objeto de una cacería.

Los ingresos generados son para los automovilistas

Como decía un exjefe mío: «El papel lo aguanta todo». ¿Por qué digo esto? Porque esta afirmación es cierta y contablemente el dinero que generan los radares de la DGT se supone que va a financiar la propia DGT. Pero a nadie se le escapa que, cuando se hacen los presupuestos generales este efecto se tiene en cuenta y en ministro de turno dice, “para la DGT este presupuesto, porque ya sabemos más o menos lo que ingresa por multas”, por cierto, mayoritariamente de exceso de velocidad. O sea, que no es un dinero extra bajo ningún concepto.

Los límites, la mejor solución

Pues va a ser que no. Porque se da una circunstancia curiosa: Disminuye más el número de víctimas que el número de accidentes. La ecuación es sencilla: Si la velocidad media de unos años a otros es similar, sigue habiendo un número parecido de accidentes, pero menos víctimas, ¿cuál es la causa? ¡Está claro! ¡Que los coches son más seguros!

La seguridad pasiva de los coches ha mejorado espectacularmente. Por eso más práctico que sacarnos el dinero del bolsillo para bajar unos pocos kilómetros de velocidad media, sería “meter dinero en los bolsillos” o al menos sacarnos menos dinero en impuestos, para que cambiemos de coche. ¿No os parece?

Más control, menos infracciones, menos accidentes

Esto es la traca final y la prueba de que la propia DGT ignora lo que nos cuenta cuando analiza las estadísticas. Agárrate: Según la DGT alrededor del 60 por ciento de los accidentes de tráfico no están relacionados con ninguna infracción. ¡Toma ya! O sea que, en vez de perseguirnos a los conductores como delincuentes, parece que sería mejor ayudarnos como usuarios… ¡parece evidente! ¡Los conductores somos víctimas, no verdugos!

Aquí tienes 10 trucos para conducir de noche.

Conclusión

Para mí sería ésta, insisto, los conductores somos víctimas, no verdugos. Víctimas de unas carreteras mejorables, de unos exámenes absurdos, de una persecución a la velocidad injusta e ineficiente, de un tsunami de impuestos que no revierte en nosotros, de falta de controles de alcoholemia, de una Guardia Civil de Tráfico a la que la no dejan hacer lo que es su verdadera vocación y lo que mejor saben hacer que es ayudar y no sancionar, o unos directores de la DGT que son políticos de bajo perfil y no técnicos, víctimas de una falta imperdonable de apoyo a los cursos de reciclaje..… y así podría seguir, pero se nos acaba el tiempo.

Coche del día

¿Qué os parece el Toyota Supra Bi-Turbo de la 4ª generación aparecido en 1993? Con su motor de tres litros, con dos turbos, 330 CV y propulsión trasera, era un verdadero aparato. Y muy bonito. Recuerdo cuando lo probé…

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