La casa de subastas Bonhams ha comunicado el “top-ten” de sus ventas durante 2022. Ferrari, Porsche, Bugatti, BMW y Lamborghini han sido las marcas más cotizadas, con hitos que han rozado los cuatro millones de euros y que no han bajado de uno y medio. Realmente no son coches, sino inversiones económicas, lo que no quita que se pueda rodar con ellos… si eres valiente y arriesgado.
Durante 2022 ha habido muchas grandes subastas y muchas ventas de grandes vehículos que no han sido comunicadas. Bonhams es de las que sí anuncia sus resultados obtenidos en las principales manifestaciones clásicas de todo el mundo. Y eso que han dejado de venderse algunas joyas que no han alcanzado los precios previstos, como un Jaguar E Type Lightweight que –pese a alcanzar una puja de seis millones de dólares- se quedó en manos de su propietario, que quería más de siete.
Bugatti EB110 GT de 1996: 1.817.000 €
En los años ’90 renació la marca Bugatti en Italia, de la mano del empresario y entusiasta Romano Artioli. Ingenieros de prestigio como Paolo Stanzani o Marcello Gandini fueron los artífices de un magnífico superdeportivo denominado EB110. Con un motor V12 con cuatro turbos y 568 CV, tracción integral, 340 Km/h de velocidad punta y una carrocería espectacular fue un mito desde que la primera de sus 125 unidades producidas. Esta pieza se vendió por precio récord en la subasta celebrada en Paris.
Lamborghini Miura P400 S de 1969: 1.957.500 €
El Miura fue el principal rival de los Ferrari de los ’60. Lamborghini consiguió su propósito con su bonito y rápido deportivo biplaza con motor V12 transversal. Ahora es un modelo mítico que se cotiza al alza. Este P400S “Lime Green” ha sido completamente restaurado del primer al último tornillo y está considerado como el mejor Miura de los EE.UU. Fue subastado en The Quail, en California.
Bugatti Type 35B de 1929: 2.250.000 €
La joya de la subasta celebrada por Bonhams en Mónaco fue este Bugatti de competición de la década de los ’20. Sólo se fabricaron 45 unidades en su época y la mayoría están a buen recaudo en colecciones privadas o en museos y no salen a la venta. Esta pieza única ha pertenecido a una de ellas durante el largo periodo 47 años y está absolutamente comprobada su originalidad y su historia desde su fabricación. Por eso no ha extrañado a nadie que superara en la puja los dos millones de euros.
Ferrari F40 de 1991: 1.977.500 €
Para la mayoría, el F40 es el supercar definitivo. El último concebido en vida de Enzo Ferrari, el primero en superar los 320 Km/h… y, si es de color “rosso corsa”, pues mucho mejor. En una subasta, un F40 siempre es un valor seguro, dinero contante y sonante… y cada vez más. Esta unidad apenas acumula 20.000 Km en su marcador y es una de las 1.315 que se produjeron. Fue subastada en el evento suizo de Gstaad por una cifra que rondó los dos millones, duplicando su precio original.
Ferrari 250 Europa GT de 1955: 2.095.000 €
Otro Ferrari por encima de los dos millones de euros y tampoco es de extrañar, porque cada vez aparecen menos modelos de los míticos años ’50. Un precioso ejemplo de la unión del motor V12 Colombo con una carrocería obra de Pinin Farina. Certificado por la propia Ferrari Classiche en originalidad y “matching numbers”, fue creado para el Salón de Bruselas de 1956, incluyendo mejoras, como muelles traseros en lugar de ballestas. Fue vendido en The Quail.
BMW 507 de 1957: 2.350.000 €
Muchos se preguntan por qué un BMW descapotable de los ’50 alcanza estas cifras récord. No tiene realmente explicación, porque era muy inferior a su rival comercial del momento, el Mercedes 300 SL. Se fabricaron 254 unidades, de las que 34 correspondían a la Serie 1 como el subastando en Zoute, en Bélgica. Completamente restaurado en 2009, tiene en su haber un tercer puesto de Clase en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach de 2013.
Bugatti Type 57C Atalante de 1938: 2.200.000 €
Esto sí que tiene total explicación: este es uno de los tres 57S Atalante que diseñó y construyó Jean Bugatti con carrocería de aluminio y motor sobrealimentado de 160 CV. Uno de tres. Una pieza rarísima y preciosa, dotado del maravilloso motor de ocho cilindros en línea con compresor Roots. Perteneció al mismo coleccionista durante 60 años y es completamente original, saliendo a subasta en The Quail y obteniendo un precio a su altura.
BMW 507 de 1957: 2.300.000
No es el antes, es otro BMW 507 con una puja similar, que se obtuvo en la subasta de Rhode Island, en EE.UU. En este caso un “más normal” Serie 2 roadster sin hardtop (como el anterior). En su día fue comprado como “donante” de piezas y recambios para la otra unidad que tenía su propietario de Philadelphia. Y ha estado 43 años en su poder, antes de restaurarlo para venderlo. Se puso en marcha por primera vez en mayo de 2022.
Ferrari LaFerrari de 2014: 2.558.750 €
Costaba la mitad –nuevo- hace apenas ocho años. Pero su precio se ha incrementado geométricamente y no parece tocar techo. En su momento sólo 499 fieles clientes de Maranello tuvieron oportunidad de adquirirlos. Ahora parece que no son tan fieles… y sí al “vil metal”, ya que han doblado su valor. Esta unidad subastada en Paris estaba nueva, con apenas 930 Km en el marcador y no era rojo, sino amarillo Módena, tras pasar por el pintor en 2016. También había sido retapizado en cuero gris con rayas amarillas…
Porsche 550 Spyder de 1955: 3.921.100 €
Record absoluto de precio durante 2022, este Porsche Spyder del ’55, que rozó los cuatro millones de euros. Fue subastado en Amelia Island a comienzos de año. Este pequeño “matagigantes” apenas tenía 135 CV en su motor bóxer de cuatro cilindros, pero su peso-pluma le permitía ganar a otros mucho más potentes. Con historia contrastada y en manos del mismo propietario los últimos 50 años, esta unidad ha batido todos los records del modelo.
