Volkswagen Polo, ahora con IQ.DRIVE o por primera vez conducción semiautónoma

El diseño renovado del Volkswagen Polo incluye no un nuevo coche pero sí muchas mejoras estéticas que lo actualizan notablemente. Además, hay que sumar más más equipamiento y, entre él, el llamado IQ.DRIVE Travel Assist, que es opcional, y que se puede resumir en un paquete para alcanzar la conducción semiautónoma de nivel 2.

El Volkswagen Polo es noticia por su “diseño renovado” en el que se introducen cambios estéticos y de equipamiento que afectan, o mejor dicho, actualizan, su imagen, que no su estructura ni otros elementos mecánicos.

Desde las últimas evoluciones del Volkswagen Polo la verdad es que no solo casi es un Golf en dimensiones, también creció en prestaciones, comodidad y facilidad de conducción y equipamiento.

Según nos recuerda la propia marca, el Volkswagen Polo es un “superventas” y, desde 1975 que se lleva produciendo y vendiendo, van más de 18 millones de unidades fabricadas siendo uno de los coches compactos más vendidos y de más éxito. Sin duda alguna, 18 millones de unidades en todo el mundo son muchas unidades.

La fabricación del Volkswagen Polo, hay que recordarlo, se lleva a cabo en Uitenhage, Sudáfrica, pero también en la fábrica de Pamplona, en España, y de ahí se lleva a muchos mercados en el mundo. Según Volkswagen “es uno de los tres modelos de la marca más vendidos”.

La actualización estética y de equipamiento afecta tanto por fuera como dentro y a la vez se hace más tecnológico

Si lo miramos detenidamente, este Volkswagen Polo añade una nueva parrilla que a su vez incorpora por primera vez también una línea led que puede combinarse además, y opcionalmente, con los faros Matrix LED IQ.LIGHT (¡vaya nombrecitos!).

Como lo describe la marca, “el nuevo Polo tiende un puente hacia los modelos ID. y el nuevo Golf y Arteon, que fueron los primeros Volkswagen con una barra transversal led en el frontal”. Bueno, pues así sea.

La parte trasera también adquiere nuevos grupos ópticos, divididos en dos partes (una sobre la carrocería y otra sobre el portón) que además tienen iluminación led. El Volkswagen Polo de mayor equipamiento además incluye luces intermitentes de “efecto barrido”. El acabado R-Line incluye un difusor en esta parte.

Por dentro, el Digital Cockpit ya es de serie en todas las versiones (es el cuadro de relojes digital y configurable) que en algunas generaciones anteriores del Volkswagen Polo o era opcional o bien para la versión más deportiva, creo recordar.

En opción, Volkswagen ofrece el llamado IQ.DRIVE Travel Assist, o sistema de asistencia para la conducción semiautónoma

Es la primera vez también que el Volkswagen Polo se atreve con este tipo de tecnología, con el llamado IQ. DRIVE Travel Assist para la conducción semiautónoma. Concretamente con la de nivel 2.

Este sistema agrupa al ACC, o Control de Crucero Adaptativo, y al Lane Assist, o asistente de permanencia en el carril, como si fuera uno solo. El ACC es de serie en el acabado R-Line del Polo. De esta forma, se anuncia esa conducción semiautónoma o “conducción parcialmente automatizada hasta 210 km/h”.

Las versiones de equipamiento son Polo, Life, R-Line y GTI, de menor a mayor equipamiento, abandonando las que hasta ahora se conocían como Edition, Advance y Sport.

Para lo anterior, el volante también es nuevo y está “equipado con superficies capacitivas que registran que el conductor toca con sus manos el volante con el sistema mencionado activo”. Y es así, tiene que ser así, porque es obligatorio en la UE para lo que se exige para el nivel 2 de conducción autónoma entre otras cosas.

Además de ese sistema opcional, este Polo equipa de serie otro tipo de sistemas como el Front Assist con frenada de emergencia en ciudad y con aviso de salida de carril. Según Volkswagen “el Polo se convierte así en uno de los coches de su segmento con la más amplia e innovadora gama de sistemas de emergencia”.

También incluye ahora elementos como el Climatronic, sistema de entretenimiento de última generación con control online (o eSIM) y App Connect, además de un panel controlado por superficies táctiles para el climatizador automático, tal y como se ofrece ya en el Volkswagen Tiguan, Passat y Arteon, airbag frontal situado en el respaldo del asiento del conductor, etc. Si el Volkswagen Polo lleva tiempo creciendo tan tamaño, también lo hace en acercarse más a lo que ofrecen segmento superiores, no cabe duda.

El mencionado Digital Cockpit se resuelve con una pantalla digital de 8,0 pulgadas de tamaño que, recordemos, es de serie a partir de ahora. Como también es de serie ahora el sistema de audio Composition Media que consta de una pantalla táctil de 6,5 pulgadas de tamaño. Además de todo esto, este Volkswagen Polo de ahora incorpora un montón de elementos más, principalmente, como dotación de serie.

En cuanto a motorizaciones, ofrece varias posibles elecciones en gasolina de tres cilindros que van desde los 95 hasta los 207 caballos

El motor de acceso a la gama es un 1.0 TSI de 95 caballos de potencia que, como el resto, es de tres cilindros. Se puede combinar tanto con el cambio manual de cinco velocidades, que es de serie, como con el DSG de 7 relaciones que es opcional.

Ese mismo bloque y cilindrada está disponible con una potencia de 110 caballos. En este caso, la mecánica está sobrealimentada por un turbocompresor para lograrlo, básicamente. En este caso, el único cambio de marchas disponible es el DSG de 7 velocidades.

En un plano superior, no solo por precio, equipamiento y prestaciones, también por estatus, está el Volkswagen Polo GTI. Aunque en realidad esta versión se anuncia para 2022, que está a la vuelta de la esquina. Para ello, contará con el motor de 2,0 litros con tecnología TSI y una potencia de 207 caballos de potencia también con turbocompresor.

La opinión de Garaje Hermético

El Volkswagen Polo ha sido siempre un buen compacto, pero ha medida que ha evolucionado ha crecido en todos los sentidos. Desde mayor tamaño, casi o igual, es como un Volkswagen Golf hace un par de generaciones, hasta conseguir niveles de eficiencia en prestaciones como las del GTI. Ahora, además, con esa llamada conducción semiautonóma. No la querría yo para conducir la versión GTI de 207 caballos.

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