Peugeot ha presentado el “diseño definitivo para un coche de carreras” traducido en el 9×8 Hybrid Hypercar. Para hacerlo, tanto los diseñadores como los ingenieros han trabajado estrechamente con el equipo Peugeot Sport. El resultado, según la marca, es que “el nivel de análisis no ha tenido precedentes”.
Parece que los astros más venerados e importantes se han alineado una única vez en el cosmos. Y por eso ha nacido el Peugeot 9×8 Hybrid Hypercar de la marca francesa. Es, según su comunicado, “un icono, una revolución estética y técnica, y una definitiva aventura de diseño”. No sé si será todo eso, pero desde luego el resultado es espectacular, brillante a simple vista.
El equipo de diseñadores y el equipo de Peugeot Sport haciendo piña
El Peugeot 9×8 Hybrid Hypercar es el resultado de un “savoir faire” francés indiscutible, pero también de un conocimiento del mundo de las carreras fascinante. Por eso, la propia marca a través de Matthias Hossan, que es el Director de Estilo de Peugeot, se jacta de que ingenieros, diseñadores y más han trabajado estrechamente con el equipo de Peugeot Sport y que el resultado es un vehículo de competición que aúna estilo y tecnología. Eso, más unas estimulantes fotografías de la mano de la fotógrafa Agniesza Doroszewicz han hecho un todo.
Para hacer realidad el Peugeot 9×8 Hybrid Hypercar primero se lanzó un concurso entre los diseñadores. Aquí no solo se trataba de diseñar un coche, también de hacerlo sobre un coche de competición. Una vez concluido, los diseñadores y el equipo de Peugeot Sport se pusieron manos a la obra.
Al parecer, en el pliego de condiciones nunca se planteó ningún compromiso en el plano de las prestaciones, vamos, que hubo “barra libre”. Tanto que “bajo una innovadora normativa, los ingenieros han dejado el mayor espacio posible para permitir a los diseñadores libertad de creatividad para desarrollar el diseño del Hypercar”. No sé, es algo como así como si en un empresa los contables le dieran carta blanca de gastos a los comerciales…
Por eso, el Peugeot 9×8 Hybrid Hypercar se hizo con el ADN de la normativa LMH (Le Mans Hypercar) que dicta el Automobile Club de l´Ouest que, por si no nos suena, es el organizador de Las 24 Horas de Le Mans, junto con la Fédération Internationale de l´Automobile. De esta forma se asegura que este coche marcará un hito en la historia de las carreras de resistencia.
Como tantas otras veces, los coches de calle se han beneficiado de técnicas empleadas en los coches de competición, y a veces, viceversa. Además del nuevo logo con la cabeza del león que se presentó en el Peugeot 9×8 con anterioridad, también el diseño del i-Cockpit tienen parangón en ambos ámbitos.
Algunas de sus características que se pueden observar
A pesar de que se trata de un coche de competición, claramente, hay detalles que parecen faltarle, pero que no le faltan. En este coche también subsiste la idea de que no solo provocase ideas de competición sino también de calle. Aquello de que podría ser un coche deportivo que también pudiese conducirse en la calle, homologarse para la conducción por carretera, vaya.
Por ejemplo, es destacable que a pesar de su afilada línea, su clara vocación deportiva, no tenga un alerón trasero prominente. Desde 1971, ningún coche de carreras que se precie en Le Mans, ni que haya ganado está mítica y dura prueba de resistencia, lo ha hecho sin ese elemento sobre la parte posterior del coche. Es más, el primer alerón trasero apareció en Le Mans en 1967.
Según Peugeot, “al concebir el Peugeot 9×8 Hybrid Hypercar se ha dedicado un gran esfuerzo en su zona posterior. Siguiendo el boceto original de un coche con la zaga muy corta, un cockpit ligeramente puntiagudo y una rueda trasera rodeada de forma muy particular por las formas de la carrocería”. ¡Habrá que verlo en las carreras y si destaca tanto como promete!