Mazda CX-60, el más grande, potente, rápido y electrificado de Mazda

El Mazda CX-60 es un nuevo modelo de Mazda que hace poco prometió que lanzaría, y que es el primero dentro de este fabricante en varios aspectos. Con sus 4,75 metros de longitud es el coche de mayor envergadura de la marca, el buque insignia, para que quede claro. También es el más potente de serie con sus 328 caballos. Y además, tiene el honor de ser el primer híbrido enchufable del fabricante de Hiroshima en Europa.

Mazda es una marca de palabra. Y de honores. Ha cumplido lo que hace poco dijo que iba a hacer, lanzar el Mazda CX-60. Un coche, un SUV de cinco plazas, que está por encima del CX-5. Lo está en tamaño, potencia y tecnología en cuanto a lo que impulsión se refiere. Es cierto que más adelante habrá incluso un modelo incluso de mayor envergadura, pero eso será más adelante y será otra historia, otro producto, otra información.

Mazda CX-60, el más grande y electrificado de Mazda

El nuevo Mazda CX-60 tiene cinco 4,75 metros de longitud. Para las medidas europeas es un coche grande, sin ser una nave espacial de esas enormes que se estilan en el mercado americano. Además marca un ancho de 1,89 metros por un alto de 1,68. Vamos, que hay espacio dentro parece que bastante suficiente. En el Mazda CX-5 ya no se está mal dentro… Por si fuera poco, añade una capacidad de maletero de 570 litros, que no es poco, ya con la fila de asientos traseros en perfecta servidumbre.

Entre sus muchos honores, además de los anteriores, comienza una etapa de mayor profundización en cuanto a electrificación se refiere, que incluirá no solo híbridos, también productos “cien por cien” eléctricos. El Mazda CX-60 que ahora nos ocupa, con tan buena impronta como parece transmitir, competirá en el mercado con marcas y modelos premium de la talla de nombre como Volvo XC60, Mercedes GL, BMW X3/5, etc. Y eso es un cometido para el que los ingenieros de la marca de Hiroshima parece que se han preparado muy bien.

El Mazda CX-60 se empezará en nuestro mercado en verano con un precio de salida de 50.268 euros. Habrá cuatro acabados disponibles, Prime-line, Exclusive-line, Takumi y Homura. Aún no se ha definido exactamente el nivel de equipamiento, pero como mínimo va a tener faros de leds, llantas de 18 pulgadas, navegador, etc. Los tres últimos acabados mencionados podrán completarse con cuatro paquetes de equipamiento, que son Driver Assitance, Convenience & Sound, Panoramic Sunroof y Comfort, y entre los que destacarán elementos como el sistema de sonido Bose de 12 altavoces, techo panorámico, llantas de 18 pulgadas… aunque igualmente falta saber como Mazda concreta estos paquetes. Lo que sí está claro es que no se quedará precisamente manco en equipamiento este coche.

Las imágenes muestran un interior verdaderamente agradable. Un aspecto elegante, lujoso, con todo el saber hacer de la marca, que no es poco. Eso sí, y afortunadamente creo yo, no se abusa de elementos tan actuales como pantallas de enorme tamaño para el tema de la digitalización en temas como el sistema de entretenimiento. Eso no quiere decir que no se esté al día en este sentido. Así, la pantalla mínima del centro del salpicadero es de 12,0 pulgadas. Más que suficiente, por lo que hemos visto y probado en otros modelos de la marca, para conseguir su cometido, pero sin “avasallar” visualmente. Bravo otra vez.

Motor híbrido enchufable de 328 caballos para el Mazda CX-60

Inicialmente, Mazda empieza comercializando el CX-60 con un sistema de impulsión híbrido ubicado delante (e-Skyactiv PHEV), convirtiéndose así, como he dicho y dice la marca, en el primer híbrido enchufable de Mazda en Europa.

Debajo del capó hay un motor de 2,5 litros atmosférico de gasolina de 2,5 litros de inyección directa de 192 caballos a un régimen de 6.000 vueltas, y acompañado de un motor eléctrico de 136 caballos. La potencia conjunta declarada es de 328 caballos, que no suenan precisamente a poco. Otro dato importante, si cabe más, es la cifra de par, que es de 500 Nm, lo que sobre el papel debe asegurar una respuesta muy buena y, de paso, capacidad de arrastre para lo que haga falta. La tracción es a las cuatro ruedas, y al eje trasero lo hace mediante un árbol de transmisión. La caja de cambios es automática de ocho velocidades.

Entre tantos honores, el Mazda CX-60 es rápido. Tanto que declara una aceleración de 0 a 100 km/h de 5,8 segundos que no está nada mal precisamente tampoco. Los datos de consumos son también óptimos, 1,5 l/100 km según ciclo WLTP, junto a unas emisiones homologadas también de solo 33 g/km. La batería del sistema tiene una capacidad de 17,8 kWh y una cifra de carga oficial, en enchufe de 3,7 kW en corriente alterna, de unas cinco horas. Huelga decir que, con 63 kilómetros de autonomía oficializada, se adjunta de inmediato la etiqueta CERO de la DGT.

Más adelante, la gama se completará con dos propulsores de seis cilindros con hibridación de 48 voltios, uno diésel de 3,3 litros (e-Skyactiv-D), y otro de gasolina 3.0 (e-Skyactiv). De estos, de momento no se han proporcionado las potencia.

La opinión de Garaje Hermético

Vale, un SUV más, y cada día más coches de este tipo, pero es lo que hay, lo que manda en el mercado. Este tiene el atractivo de la marca y, aún más, potencia y par de bastante nivel, y una rapidez en la aceleración muy muy buena.

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