Reprogramación de la centralita de un BMW 114i

Chema quiere reprogramar la centralita de su BMW 114i y nos pregunta nuestra opinión sobre el tema. El coche pasaría de dar 103 a 170 cv, hipotéticamente.

Pregunta

Recientemente he adquirido un BMW 114i del 2013. Este vehículo tiene de serie unos 103 CV. Buscando información del coche en mi tiempo libre, averigüé que con una reprogramación de la centralita (Stage 1) se pueden llegar a sacar del motor 220 CV. Básicamente esto se debe porque aparentemente, este modelo comparte motor con el 116i y el 118i (este último tiene 170 CV de serie). La diferencia de potencia entre un modelo y otro va por la electrónica.

Quería aprovechar esta ocasión personal para de paso preguntarte por la opinión que tienes de las reprogramaciones de centralitas y, si en un caso como el que me acontece a mí, realizarías una. El coche lo voy a usar de diario y para ir a trabajar, realmente con 103 CV el coche va estupendo, pero tener el caramelo de 220CV con una simple «repro» se me hace la boca agua.

Claramente si me decidiese a realizar el Stage 1 al coche, no dudaría en llevarlo a profesionales capacitados aunque sea más caro.

Respuesta

El tema que nos planteas es complicado. Por una parte estás en lo cierto: hay motores de una marca que se ofrecen con distintas potencias y todo o casi todo depende de la electrónica. Y decimos «casi todo» porque un aumento de caballos supone normalmente más presión de turbo (es lo normal) y más calor. En ocasiones, las versiones más potentes tienen turbos distintos, válvulas de descarga diferentes y -sobre todo- sistemas de refrigeración reforzados (intercooler, radiador, bomba de agua…). Por tanto, no es tan sencillo hacerlo ni en un concesionario oficial y con piezas de fábrica. Entérate muy bien de todos los detalles antes de gastar un euro.

Cualquier reprogramación «artesanal» la desaconsejamos por sistema. Por buenos que digan que sean. Puede ir bien (a costa de mayor consumo, naturalmente, que los milagros no existen), pero muchas veces va mal y, siempre, acorta la vida del motor y da muchos problemas electrónicos a la larga.

Si con los 103 CV el coche va estupendo… déjalo así. Ahorra ese dinero (y lo que te ibas a gastar en reparaciones posteriores) para comprarte otro más potente la próxima vez.

En este vídeo hablamos sobre cuánta potencia necesitas en tu coche.

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