Si hay un Salón de vehículos clásicos que sobresale en el mundo, ese es Retromobile Paris. Celebrado a comienzos de febrero cada año en los pabellones del parque de Versailles, reúne a la “flor y nata” de los restauradores, coleccionistas, vendedores y casas de subastas. Lo que se ve allí reunido es mejor que cualquier museo. Y muchos automóviles cambian de manos cada año por millones de euros…