La marca alemana BMW tiene ya sus ojos puestos en una nueva generación de vehículos “premium” pero sostenibles, para la –aún lejana- frontera de 2040. Su propuesta es el BMW i Vision Circular, un futurista automóvil compacto, cien por cien eléctrico y dotado de una gran comodidad para sus ocupantes.
En los años ’50 y ’60 del pasado siglo se especulaba con diseños aeronáuticos, propulsiones atómicas… que hacían soñar a los automovilistas de su época. Poca de esa imaginación fue llevada a la práctica. Los diseñadores de BMW especulan hoy sobre cómo serán los turismos de dentro de dos décadas, en 2040. Y acaban de presentar su proyecto i Vision Circular.
El Salón IAA de Munich permitió a los fabricantes alemanes mostrar sus mejores ideas. BMW presentó nada menos que cinco prototipos, cinco “Concept Cars” basados en la movilidad eléctrica sobre dos y cuatro ruedas, la digitalización y la sostenibilidad. Además de la electrificación de la gama de modelos y el paso a la energía renovable para su fabricación, BMW se centra especialmente en los principios de la economía circular y el uso de materiales secundarios (aluminio y acero).
Así será el BMW compacto del futuro
El prototipo i Vision Circular de BMW presentado en Munich es un compacto de apenas cuatro metros de longitud, cuatro cómodas plazas y propulsión eléctrica. Está repleto de ideas y materiales innovadores para combinar la sostenibilidad con una estética nueva apodada por la marca «diseño circular». El diseño circular abarca cuatro principios: RE:PIENSA, RE:DUCE, RE:USA y RE:CICLA.
La parte frontal del i Vision transmite el poder estético del diseño circular. El número de piezas se ha reducido al mínimo. En lugar de tener un borde cromado, la parrilla (con los riñones de BMW) se ha interpretado como una superficie digital. La superficie de los «riñones» se extiende por todo lo ancho del frontal, fusionándose con los faros y la parrilla. Al mismo tiempo, las superficies de los riñones se convierten en una interfaz gráfica.
Las superficies bajo el parabrisas son de aluminio secundario. Un grupo de sensores adicional entre los dos riñones agrupa las funciones tecnológicas, permitiendo un desmontaje sencillo dentro de un único elemento desmontable. En el futuro, el diseño digital podría hacer que las variaciones geométricas de las luces y los paragolpes sean prescindibles, lo que ayudaría a reducir la cantidad de materiales y herramientas necesarias.
El BMW i Vision Circular ha sido creado con diseño de monovolumen y compuesto por un número mínimo de piezas y materiales. El vehículo se extiende en un volumen ininterrumpido desde el eje delantero hasta el trasero, ofreciendo una generosa habitabilidad interior partiendo de un espacio reducido. Las ruedas marcan casi los límites exteriores del vehículo, combinándose con los prominentes pasos de rueda, para darle un aire deportivo. El i Vision ofrece un interior propio del segmento de lujo en un coche pequeño.
Sin pintura ni adhesivos tóxicos
El BMW i Vision Circular evita el uso de pintura para el exterior; y en su lugar presenta una carrocería de aluminio secundario con un acabado en oro claro anodizado. Esto demuestra que en el futuro será posible dar un acabado a las superficies mediante procesos innovadores sin necesidad de recurrir a acabados de pintura.
Los neumáticos de «Vivid Blue Rubber» están fabricados con caucho natural certificado y cultivado de forma sostenible y tienen un aspecto ligeramente transparente. Para reforzar el compuesto de los neumáticos se añaden partículas de caucho reciclado de más color, lo que crea un efecto “terrazo “. Las llantas están diseñadas y fabricadas con un uso mínimo de materiales.
En el habitáculo, el BMW i Vision Circular busca crear un ambiente lujoso y también nuevas e inteligentes técnicas de unión entre los mismos que evitan el uso de pegamento. Para minimizar la cantidad de residuos y recortes, todos los componentes y materiales se fabricarán a medida mediante procesos como la impresión 3D.
Proporcionando un alto grado de luminosidad y una sensación de espacio abierto, las dos puertas exteriores se abren de par en par para revelar un habitáculo luminoso. El techo de cristal con una pronunciada colocación hacia atrás da -a los que van delante- la impresión de estar sentados al aire libre. También maximiza la sensación de amplitud que se experimenta dentro de un espacio reducido. Los cuatro asientos se han diseñado intencionadamente para que parezcan muebles.
Los pasajeros, como en casa
Los pasajeros posteriores se benefician de la pronunciada orientación hacia atrás del parabrisas: un techo de cristal independiente con función de sombreado automático. La tapicería de los asientos en MONOchrome Taupe está fabricada en su totalidad con material reciclado. La lujosa tapicería cuenta con un preciso bordado y se sujeta con botones de presión para facilitar el desmontaje, al igual que en los asientos delanteros.
El salpicadero digital se ha convertido en una interfaz “Phygital” de última generación. Adopta la forma de una escultura flotante en forma de V que se proyecta hacia el interior del habitáculo. En su centro hay un cuerpo de cristal impreso en 3D con nervios que lo atraviesan, dando una gran profundidad visual y un fascinante efecto de iluminación. Aquí es donde se proyecta el «pensamiento» del vehículo.
Para BMW, en 2040 los coches seguirán llevando volante, que constituye un vínculo entre el pasado y el futuro aunque reduce la cantidad de material y componentes. El aro se ha impreso en 3D a partir de material biológico, y la opción del polvo de madera da al volante una sensación natural y cálida. La posición central, poco convencional, del radio vertical en bronce dorado añade el toque de modernidad.
El compositor Hans Zimmer y Renzo Vitale, Director Creativo de sonido de BMW Group, han diseñado un sonido exclusivo para el BMW i Vision Circular que permite que su circularidad también se escuche. Se han inspirado en diversos instrumentos, como un violonchelo antiguo, que seguirá escuchándose en los tiempos modernos gracias a las bondades de la circularidad digital.
Como vehículo eléctrico y acumulador de energía, el BMW i Vision Circular también ofrece la posibilidad de ser utilizado como un elemento de carga bidireccional. En este caso, actuaría como un dispositivo móvil acumulador de electricidad y alimentaría su entorno, por ejemplo, edificios o infraestructuras. Incluso podría devolverla a la red eléctrica para ayudar a absorber los picos de demanda.
