Manuel nos pregunta por los frenos en competición, porque se da mucha información sobre los neumáticos, su temperatura, compuestos y fabricantes; pero, ¿qué pasa con los frenos?
Pregunta
Me llamo Manuel Pérez y soy suscriptor del canal además de miembro de la parte de socios. También gracias a una Yamaha XJ600N Diversion del 99 soy mecánico de motos aficionado y también sigo las competiciones de MotoGP y Superbikes.
Hace tiempo que le doy vueltas a un elemento de la competición del que no se suele hablar en las retransmisiones de las carreras. Es frecuente que se comenten aspectos sobre los neumáticos (dureza, temperatura, compuesto, etc), que nos muestren cómo los calientan antes de salir a pista haciendo hincapié en que las primeras curvas/vueltas la temperatura no es óptima, su simetría/asimetría, etc.
Pero tengo una duda de la que creo que no se habla demasiado: ¿las pastillas de freno siguen el mismo o parecido protocolo que los neumáticos? Me refiero a que, según mis conocimientos de aficionado, unas pastillas no rinden al 100% desde el momento en que se montan sino que hay un proceso de adaptación así que me pregunto varias cosas:
- Si las pastillas están «rodadas» de fábrica o necesitan un desgaste inicial.
- Qué materiales usan, qué duración tienen, con qué frecuencia se cambian, qué precio tienen.
- Si pasa como en los neumáticos, que hay varias opciones a elegir o el suministrador (¿Brembo?) obliga a montar la recomendada para cada circuito.
- Y ya que estamos: tipos de bombas, latiguillos, pinzas, refrigeración, etc.
El primer punto se podría responder en el consultorio pero quizá el resto den para un buen vídeo de los vuestros.
Gracias por vuestra atención y por la cantidad de conocimiento que nos ofrecéis por menos de 1€ al mes.
Respuesta
Esto daría para un tratado completo sobre frenos, pero desgraciadamente no tenemos ni el tiempo ni el espacio para responder en este Consultorio.
Daremos una «pinceladas» sobre tus preguntas.
Las pastillas de freno de competición existen en muchos grados de mordiente y duración, desde carreras cortas a 24 Horas. La variedad es equivalente a la de los neumáticos, aunque su evolución -circuito a circuito- no es igual.
Los suministradores conocen bien las variedades que puede montar un vehículo de competición y recomiendan a los equipos las más adecuadas al peso, y características del vehículo y a la duración de la carrera. Un equipo bueno sabrá elegir adecuadamente, ya que es su oficio.
Cada juego de pastillas debe rodarse con un estricto protocolo durante los entrenamientos libres, para que alcance su temperatura de uso y se adapte al disco, enfriándose poco a poco antes de desmontarlas y guardarlas. Después se pueden usar en carrera, donde basta ponerlas rápidamente en temperatura para su uso óptimo.
Materiales y desgaste… mejor preguntar a cada fabricante ¡si quiere decirlo!
Todo el sistema de frenada debe estar equilibrado: una bomba demasiado potente no siempre frena mejor. Hay que ver si los discos van flotantes o no, de qué material están hechos (no es lo mismo el acero que el carbono, ni si van ventilados o no) y qué tipo de pinzas (número de bombines, tamaño…). Incluso si estamos hablando de frenos delanteros o traseros. Y hay que contar con el liquido (al menos un DOT 7), con latiguillos metálicos, con repartidor de frenada…
Los frenos de competición son un mundo, tanto en dos como en cuatro ruedas.
