Siempre insisto en que la publicidad de estas revistas nos cuenta tanto de cómo se vivía el automóvil en la primavera del 89 como los contenidos editoriales. En este podcast hay de todo, técnica incluida, pero con un protagonismo a la imaginación y a os juegos de palabras… no siempre muy conseguidos, la verdad.
En el 89 no vivíamos una sociedad tan «Instantánea» como ahora. Hoy día, por ejemplo en este podcast, si no soy capaza de seduciros en los primeros 20 ó 30 segundos, como mucho, os pierdo.
¿Cómo era la publicidad?
En un mundo donde la información del automóviles eran sobre todo las revistas, eras fiel a una cabecera y, incluso aunque la portada no te sedujese, la comprabas. Eso sí, al menos yo, si la portada de la competencia me seducía la compraba también, pero «además de» no «en vez de».
Para captar el interés tanto los periodistas como los creativos publicitarios recurrían a los juegos de palabras y hoy vamos a repasar algunos de ellos, comenzando por la publicidad.
R21 Manager: Alto interés. Una publicidad que hacía referencia al excelente equipamiento de este modelo aunque no dejaba a un lado algo de lo que presumía Renault: gracias a la buena aerodinámica del 21, con 120 CV era un modelo que legaba a los 200 km/h, una referencia en ese momento.
Opel Kadett… mejor que nunca. En este caso Opel publicitaba que todo era “Muy” Opel, pero todo mejoraba, el interior, el exterior e incluso los motores…
Nissan Patrol Dakar: ¡La bestia del desierto! Por su parte la marca japonesa quería sacar partido a su imagen conseguida en el París-Dakar con una nueva versión que usaba ese nombre… poco más que unas bonitas llanas, una decoración a base de líneas negras, grises y rojas sobre la pintura blanca y unos faros supletorios… pero, la verdad, el coche era espectacular.
VW Golf Cabrio: Hay quien tiene ilusiones. Y hay quien las conduce. Yo creo que si no el 100×100 casi todos los Golf Cabrios vendido es España eran blancos con capota blanca… Y no era, desde luego, un coche barato.
Bosch y deje fuera al mal tiempo. Ahora me hace gracia que se publicitasen tanto las marcas de “recambios y accesorios”. Pero es que era cierto, al menos en mi caso, que cuando cambiaba las escobillas del limpiaparabrisas quería unas buenas y había mucha diferencia entre las malas y las buenas. Bosch eran de la buenas.
Audi V8.Un coche que empieza donde los demás terminan. Como diría un amigo mío de entonces, un “carrazo”. Línea, acabado, equipamiento, pero sobre todo un motor V8 de aluminio de 3.6 litros, 32 válvulas y 250 CV.
Sierra: ¡Todo un Ford! A veces los publicistas no dan mucho de sí. Poner un Ford Sierra en una foto con una Sierra detrás y decir que es todo un Ford… ¿hay algo más simplista? Como diría mi hija, «dime algo que no sepa».
¿Un Vespino? ¿O un camión de 25 toneladas? Este es un anuncio de una financiera, Hispamer. Y es que las marcas todavía no se habían dado cuenta del gran negocio que era la financiación. Ahora sí que lo han hecho y ganan más financiando los coches que vendiéndolos.
Adidas. Quiero y puedo. Eran frecuentes las publicidades «extra-sector» como esta donde se anunciaban unas zapatillas llamadas «torsión» que eran lo más de lo más… yo tuve unas.
Goodyear cuatro estaciones. Seguro que alguien por ahí te ha dicho que los neumáticos «todo tiempo» son algo muy moderno. Pues te han engañado. Ye en 1989 Goodyear los ofertaba y, además, como ponían en su publicidad: «A precio nacional».
Blaupunkt, Solo un pequeño punto, pero un mundo de diferencia. Y es que en estos tiempos, que los coches no levaban radio de serie, se robaban muchas radios Y las marcas proponían soluciones para evitarlo.
Algunas pruebas de coches
Una muy interesante comparativa titulada: «Trasplante de corazón» enfrentaba al Citroën AX 11 RE y el Peugeot 205 Junior. Pero detrás se escondía una verdadera revolución.
«Lo mejor de dos mundos». Así titulé la prueba del Lancia Thema Ferrari. Merece la pena leer un párrafo que explicaba esta “doble personalidad”.
Deporte
Mansell se estrena con Ferrari con victoria mientras Luis Pérez-Sala se retiraba a los 500 m de carrera… Lo más interesante era que el Ferrari montaba un cambio que los periodistas denominaban «semiautomático» y que constaba de mandos por levas en el volante… ¿te suena? Como diría mi querida Mafalda, “¡Que modernos estos antiguos!”.