¿Podría cambiar el turbo de mi Audi por un biturbo?

¿Es posible cambiar un sistema de turbo en mi Audi, por un biturbo? ¿Quiero mejorar las prestaciones cambiando el sistema de alimentación, pero si que sea brusco.

Pregunta

Mi pregunta va dirigida principalmente a realizaros una consulta en relación a un vídeo que hicisteis en su día hablando de los turbos, su funcionamiento, así como los tipos de sistemas que hay y el cómo estos han ido evolucionando con el paso de los años.

Verás, poseo un Audi A4 B5 ((Typ 8D) 1994-2001) con un motor 1.8l 20v Turbo de 150cv y tracción Quattro. Me gustaría modificarlo e instalarle un sistema turbo que me diera algo más de prestaciones, dado que mi idea, es plantarlo en una potencia máxima de 250cv (lo cual, según he leído por foros de propietarios de VAG es bastante plausible dado que al parecer es un motor muy duro, fiable y resistente y solamente con cambiar el turbo al parecer se pueden superar los 200cv sin problemas de fiabilidad y sin tener que reforzar o tocar elementos internos del propio motor), pero mi problema es el siguiente.

No quiero que sea un sistema turbo que me dé una «patada» bestial y que entre a partir de «x revoluciones» de forma brusca (como le pasaba a algunos deportivos como el Porsche 930 Turbo, etc.), mi idea sería un sistema biturbo que, a ser posible, fuese «lineal» (o lo más cercano posible a ese término en cuanto a entrada en funcionamiento y entrega de potencia), es decir, que tuviese un sistema de funcionamiento similar al del compresor por poleas (el típico supercharger vaya), de manera que pudiese tener un turbo que englobase desde el rango bajo al medio de rpm y luego, uno más grande que englobase desde el rango medio al alto de rpm, pero la idea sería, que en el relevo de uno a otro, fuese lo más lineal y suave posible.

Mi pregunta es si eso es posible y, en caso de ser posible. ¿Qué sistema sería el más adecuado dentro de los sistemas biturbo? Y otra pregunta. ¿Me podrías recomendar algún taller o empresa que me realizase dicha modificación con posibilidades de homologación (en caso de que se pueda homologar algo así, claro está)?

Respuesta

Sentimos no poder satisfacer tu deseo, pero eso que planteas es de muy difícil… a imposible.

Dejando aparte el coste de la operación (piezas, mano de obra, ingeniería…) adaptar un turbo a un motor conlleva muchos más problemas: más potencia es más calor y hay que replantear intercoolers, sistema de lubricación y de refrigeración, además del control electrónico de inyección y encendido.

Reprogramar sólo la centralita electrónica es posible (poco recomendable, pero posible) para aumentar la presión del turbo y la inyección, a costa de un mayor consumo, sufrimiento del motor y de reducir su vida útil. Sin tener que cambiar el turbo, que es el mismo.

Poner un turbo procedente de otro motor más potente del Grupo VAG seguramente también es posible, pero sin la gestión electrónica adecuada no vale para nada. Por supuesto, comprar turbos y piezas accesorias por otros conductos es jugar con dinamita.

El secreto de un motor sobrealimentado es su equilibrio en la curva de potencia y par. Conseguido principalmente gracias a una cartografía precisa, bien desarrollada por los ingenieros de la marca. Aplicar un turbo «a lo bruto» como hacen muchas veces en los programa americanos de TV, sólo sirve para conseguir una potencia lineal de golpe y acabar reventando el motor. Ya, de biturbos, ni hablamos…

Y homologar ese tipo de transformaciones, en España, es poco menos que imposible. De eso damos fe.

La solución a tu problema es mucho más sencilla: Cambia de coche. Busca otro con mayor potencia y te saldrá mucho más barato, lo tendrás antes y te quitará un quebradero de cabeza enorme, que no serás capaz de llevar a buen puerto.

Tú nos has hecho la consulta y nosotros te respondemos la verdad. No escuches tonterías sin fundamento de aprendices de mecánico en redes sociales y bares.

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