No todos los amortiguadores son iguales

He cambiado los amortiguadores de mi Opel Vectra de 2004 y no he notado ninguna diferencia; no logro unas buenas sensaciones ni comodidad.

Pregunta

Tengo un Opel Vectra C de 2004, 2.2 Direct 155cv, que compré nuevo, y cuya suspensión nunca fue de mi gusto.

Hace un par de años le tocó cambiar amortiguadores. Puse unos Monroe, económicos, pensando que era una buena marca. Para mi sorpresa, el coche iba con los amortiguadores nuevos igual que con los viejos ya reventados.

No soy una conductora experta y no sé si me explicaré bien ni si mis sensaciones son correctas. Lo que noto es que el coche tiene una suspensión suave, pero no cómoda. No sujeta correctamente la carrocería y se mueve mucho. No da confianza.

Hace poco pude probar un Toyota Auris de hace 10 años y no tenía nada que ver con mi coche. Se notaba una suspensión más firme, pero a la vez la carrocería apenas se movía, siendo el viaje mucho más cómodo. Como si en coche pesara 500 kilos menos que el mío.

Quisiera cambiar los amortiguadores, si es que pueden mejorar la situación. ¿O el problema son los muelles? ¿Quién me puede ayudar a elegir? Mi mecánico habitual me puso los Monroe y han sido un fiasco. No sé a quién acudir ni que marca poner. Por cierto, no puedo permitirme gastar 1000 euros en un kit de suspensión deportiva premium.

Respuesta

La suspensión de un coche no son sólo los amortiguadores. También influye la geometría y tipo de brazos que lleve el coche, la dureza de los muelles y las barras estabilizadoras. Todo el conjunto, que en cada coche es diferente.

Lo único que puede «tocarse» legalmente son los amortiguadores, para no tener problemas en la ITV. Monroe es una marca conocida y también económica. Los comentarios sobran.

Hay otras de mayor calidad, incluso con gama variada de amortiguadores de gas, regulables, etc. Entre ellas destacan Blistein y Koni. Aunque también están Kayaba, Spax y otras.

Cada tipo de amortiguador ofrece distintas soluciones. Los deportivos son más firmes y, los regulables, permiten ir ajustándolos al gusto del usuario (aunque a veces hay que tirarse bajo el coche para darle a la «ruedecita»).

Atención a los kits deportivos, que a veces incluyen muelles cortos que bajan la carrocería y luego no pasan la ITV. Lo mejor en tu caso sería ir a opciones más deportivas -ya que te gusta el coche sin balanceo- que las de serie, pero sin pasarse.

Te recomendamos que busques el catálogo de las principales marcas por internet y veas lo que ofrecen para tu coche (no todos valen para cualquiera). Elijas -incluso los compres- y luego los lleves a montar a un taller de confianza. Y que luego hagan la alineación a las cuatro ruedas.

Te recomendamos este vídeo sobre las suspensiones del coche.

Comparte

Te puede interesar