Los primeros automóviles eran verdaderamente difíciles de conducir, requerían de profesionales, los llamados en francés Chauffuer, que ha dado lugar a la palabra chófer en castellano. Además estos profesionales no solo conducían, sino que se hacían cargo del mantenimiento básico del coche, que era muy meticuloso. Os voy a contar una anécdota sobre Bugatti, lo que recomendaba la marca antes de arrancar